Terapia de células madre para el tratamiento del daño neural en pacientes con esclerosis múltiple.
La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad inflamatoria multifocal que afecta al sistema nervioso central y está asociada a la parálisis de las extremidades y a graves problemas en la sensibilidad, las extremidades, la vista y el esfínter. Esta enfermedad es el resultado de un mecanismo autoinmune en el que los autoanticuerpos se dirigen a los antígenos de la automielina y causan la desmielinización. Debido a la disfunción de la mielina, la EM se identifica clínicamente con discapacidades neurológicas. Además, puede entrar en la fase progresiva debido a la neurodegeneración irreversible y al daño de los axones. Desafortunadamente, no hay un método terapéutico efectivo para esta enfermedad y los medicamentos actuales se han centrado en la mejora de los síntomas y la inflamación crónica. Aunque las inmunoterapias actuales mejoran la reactividad de la antimielina autoinmune y la tasa de recaída de la EM, no hay un método aprobado para mejorar la progresión de la enfermedad y reparar la mielina dañada. Por lo tanto, es esencial encontrar un tratamiento clínico apropiado para mejorar los daños neurológicos en los pacientes con EM.
Las células madre mesenquimales (CMM) son células multipotentes con una alta capacidad de proliferación y auto-renovación, así como con efectos inmunomoduladores y neuroregenerativos. Las CMM derivadas de la médula ósea y los tejidos adiposos se han considerado para el tratamiento de diferentes enfermedades porque no sólo se pueden aislar fácilmente de esos tejidos, sino que también un paciente puede servir como donante para sí mismo sin riesgo de rechazo. Lo que es más importante, las CMM autólogas llevan un patrón más seguro sin el riesgo de transformación maligna.
¿Será un tratamiento futuro para la EM?