Fármacos para la próstata ¿futuro del Parkinson?

15.02.2021

Ciertos medicamentos utilizados actualmente para tratar la hiperplasia prostática benigna (HPB) pueden proporcionar neuroprotección y retrasar o prevenir la aparición de la enfermedad de Parkinson.

El tratamiento de la HBP con terazosina (Hytrin), doxazosina (Carduran) o alfuzosina (Uroxatral), todos los cuales mejoran la glucólisis, se asoció con un menor riesgo de desarrollar la enfermedad de Parkinson, comparado con los pacientes que tomaban un medicamento utilizado para la misma indicación, la tamsulosina (Flomax), que no afecta a la glucólisis.

Sin embargo, la patogénesis de la enfermedad de Parkinson es heterogénea y no todos los pacientes pueden beneficiarse de los medicamentos que mejoran la glucólisis.

Se necesitarán investigaciones futuras para identificar a los posibles candidatos para este tratamiento y aclarar los efectos de estos medicamentos.

Los resultados se publicaron online el 1 de febrero en JAMA Neurology.

El principal factor de riesgo de la enfermedad de Parkinson es la edad, que se asocia con el deterioro del metabolismo energético. La glucólisis está disminuida entre los pacientes con Parkinson.

Los investigadore utilizaron datos de utilización de la atención médica de Dinamarca y los Estados Unidos, incluyendo el Registro Nacional Danés de Prescripciones, el Registro Nacional Danés de Pacientes, el Sistema de Registro Civil Danés y la base de datos MarketScan de Truven Health Analytics.

Entre los pacientes daneses, los que tomaron terazosina, doxazosina o alfuzosina tuvieron un menor riesgo de desarrollar Parkinson frente a la tamsulosina (hazard ratio [HR], 0,88). 

Asimismo, los pacientes de la base de datos Truven que tomaron terazosina doxazosina o alfuzosina tuvieron un riesgo menor de desarrollar Parkinson que los que tomaron tamsulosina (HR, 0,63).

En ambas cohortes, el riesgo de padecer Parkinson entre los pacientes que recibieron terazosina, doxazosina o alfuzosina, en comparación con los que recibieron tamsulosina, disminuyó con el aumento del número de prescripciones. 

El tratamiento a largo plazo con cualquiera de los tres fármacos potenciadores de la glucólisis se asoció a una mayor reducción del riesgo en las cohortes danesa (HR, 0,79) y Truven (HR, 0,46) frente a la tamsulosina.