¿Podría un probiótico prevenir o revertir el Parkinson?
Las proteínas
alfa-sinucleína mal dobladas en el cerebro son el signo distintivo
de la enfermedad de Parkinson.Muchos expertos creen que
estos cúmulos de proteínas tóxicas conducen a la pérdida
progresiva de las células cerebrales que controlan el
movimiento.Pero los estudios no son claros, y los
mecanismos subyacentes que causan el Parkinson siguen siendo
esquivos.Sin una manera efectiva de prevenir o curar el
Parkinson, el tratamiento se centra principalmente en el alivio de
los síntomas.Una reciente línea de investigación ha
estado buscando un posible vínculo con el microbioma intestinal, los
trillones de especies microbianas que pueblan nuestros
intestinos.
¿Podría cambiar el microbioma intestinal de una
persona ser una manera de modificar su riesgo de desarrollar el
Parkinson o incluso servir como un tratamiento efectivo?Un
grupo de científicos de las Universidades de Edimburgo y Dundee,
ambas en el Reino Unido, se propusieron investigarlo.Para
su estudio utilizaron un modelo de gusano nematodo que los
científicos habían diseñado genéticamente para expresar una
versión humana de la proteína alfa-sinucleína.
Estos gusanos
normalmente desarrollan agregados, o grupos, de alfa-sinucleína en
el primer día de su vida adulta, que es 72 horas después de que
eclosionen.
Sin embargo, cuando los investigadores alimentaron a
los gusanos con una dieta que contenía una cepa bacteriana
probiótica llamada Bacillus subtilis PXN21, observaron "una
ausencia casi completa de agregados", como afirman en su
trabajo. Los gusanos todavía producían la proteína
alfa-sinucleína, pero no se agregaba de la misma manera.
En los
gusanos que ya habían desarrollado agregados de proteína, el cambio
de su dieta a B. subtilis eliminó los agregados de las células
afectadas.
Para averiguar cómo B. subtilis es capaz de prevenir
y eliminar los agregados de alfa-sinucleína, el equipo utilizó el
análisis de secuenciación de ARN para comparar la expresión génica
de los animales que recibían una dieta estándar con la de los que
recibían el probiótico.
Este análisis reveló cambios en el
metabolismo de los esfingolípidos. Los esfingolípidos son un tipo
de molécula de grasa, y son componentes importantes de la estructura
de nuestras membranas celulares.
También vieron que B. subtilis
era capaz de proteger a los animales más viejos de la agregación de
alfa-sinucleína a través de la formación de estructuras complejas
llamadas biopelículas y la producción de óxido nítrico.